sábado, 27 de septiembre de 2014



Guardo en ti el secreto de mis silencios,
el bosque de mis ojos cuando miras,
la súplica de mis dedos agonizantes en
el último adiós.

Dime si en mi pecho se balancean dos columpios;
                     si ves en mí
alguien que no veo.
Dime si sufres como yo las líneas que separan tus pasos de los míos;
                                                            si negocias una tregua con tus miedos.
            Dime si en el silencio encuentras el
relámpago desamparado que busca tus manos,
mi nombre moribundo arrastrándose por ellas.

Dime levemente, no hace falta que lo digas:
"Guardo en ti el secreto de mis silencios,
el tiempo que nos abandona y
nos hace
cómplices".

jueves, 24 de julio de 2014

Ahora que sólo existimos frente al mar,
que estos ojos son mis ojos y
que mis dedos bailan en la arena,
           acércate y dime al oído:
"Tú siempre te sentirás solo".

lunes, 28 de abril de 2014

55

Una mano en la nada,
          escribiendo
la nada.

Una mano lenta
          deslizándose
en la nada.

Una mano
          acariciando
lo que nunca nadie dijo.

Una mano en la nada
          siendo, al fin,
la nada.  

miércoles, 26 de marzo de 2014

Venice

"Yo soy mi propio abuelo viendo a mi infancia jugar"
Félix Francisco Casanova



Una suave melodía azul
acompaña al día y a la noche
por los canales de Venecia.

Yo, que soy aire y lluvia,
dejé caer el invierno sobre tus párpados.

¿Dónde iremos ahora que todo es pasado, presente y futuro?
Allí donde desamanecer entre ropa quemada,
convertimos el espíritu en palabra y
mi cuerpo
es una excusa.

¿Qué eres tú?
esperanza y desasosiego;
ritmos rotos
en el patio del colegio.

¿Qué soy yo?
dos finales tristes
y una cara B
que no dejaba de sonar.

Si alguna vez fui niño, me
rompiste en la memoria del
hombre hambriento,
donde los héroes esparcen su semen
como la semilla de Dios.

Yo, que soy lluvia y aire,
atravesé tu cráneo con la crudeza de una lágrima.

En los canales de Venecia
las luces se dividen en compases de cuatro por cuatro,
porque la vida es un insecto al que han arrancado las patas.

lunes, 10 de marzo de 2014

"te ofrecí, te ofrezco
mi destrucción."
Leopoldo María Panero 



He muerto en el espejo y ahora
soy ya
           el-que
                        no-es.
Vestido de verde pluma he
venido a morir en ti.

Te escribiré en las heridas
con la tinta de la redención.
           Maniatado y
                       sin ayuda
vendré a pedirte disculpas.

Y me leerás en silencio
con
           el silencio
                       de la vida
e intentarás salvarme
                       pero no
           me salvarás.